Cómo es vivir con más de 350.000 seguidores en Instagram

Marta Lozano nació en Valencia. Estudia derecho en la universidad, cumplió veinte años el año pasado y tiene, solo en Instagram, más de 350.000 seguidores, donde sube con frecuencia fotos sobre lo que viste y le gusta. (Dicho de otro modo: más de 355.000 personas pendientes de cada foto, de cada actualización, de cada tag.)

Es un ejemplo perfecto de lo que llevamos ya años viviendo: ahí fuera hay jóvenes que saben usar las redes sociales mejor que nadie, chavales con talento y habilidad para conectar con la gente y que se ganan la vida gracias a ello, usando internet como muestrario no solo de sus conductas y ritmos de vida, sino también de sus aficiones y trabajos particulares; todo joven quiere destacar en lo suyo, y por ello tener menos de veinticinco años y no tener Instagram en 2016 es como no estar casado con cincuenta: quien lo escuche lo intentará entender entre pretendidas sonrisas, pero le seguirá pareciendo curioso y extraño cuanto menos (sea en un pub o en donde quiera que vaya la gente mayor de cincuenta años: si tuviesen Instagram quizás lo supiésemos).

La red social nos puede gustar más o menos, pero lo cierto es que en este momento es una ventana increíble para entender cómo los millennials utilizan internet de una forma maravillosa, fuera de cualquier prejuicio que la gente que simplemente no concibe algo así pueda pensar. En cualquier caso, y aunque normalmente solemos asociar estos perfiles con jóvenes de otros países, en España también encontramos gente que conviven con ingentes cantidades de seguidores, como Marta.

Hemos hablado con ella sobre cómo es vivir con tantos ojos encima:

VICE: ¿A qué crees que se debe que ahora parezca que el star system se esté diluyendo poco a poco, con una sociedad que parece querer convertir a personas normales en estrellas?

Marta: Precisamente por el cambio que estamos experimentando en nuestra sociedad, cambia la forma de expresarnos, la forma de relacionarnos entre nosotros, los medios por los que lo hacemos, y en consecuencia cambia todo el sistema en general. Actualmente cualquier persona tiene la oportunidad de mostrar su talento y compartirlo con el resto del mundo mediante las redes sociales, cosa que hace unos años era impensable, y las oportunidades para triunfar eran muy limitadas.

Entonces, ¿es mucho más fácil hacerse famoso que antes?

Bueno, las facilidades que tenemos la gente de a pie para poder expresarnos y ser escuchados por mucha gente gracias a las redes sociales me parece una maravilla. Creo que hay personas con muchísimo talento en nuestro país y las posibilidades para poder mostrarlo al mundo son infinitas. El hecho de "hacerse famoso" creo que es otro tema. Triunfar, o simplemente caer en gracia, lo veo mucho más complicado, pero bueno: todo es cuestión de tener algo que te guste, que te apasione, y trabajar en ello. El reconocimiento vendrá o no, pero tú serás feliz con lo que haces.

¿Cuál crees entonces que es el secreto para hacerse popular en una red social como Instagram?

No sé si existe un secreto concreto para el éxito, pero lo único que puedo aconsejar es ser fiel a lo que eres, a lo que crees y lo que te gusta, trabajar duro en ello y mirar hacia delante.

¿Lo consideras un negocio?

Más allá que un negocio (que también) es algo que me encanta hacer y que me apasiona. Me siento una afortunada.

¿Estudias o trabajas en algo? ¿Lo haces por tener una segunda opción?

Mi primera opción son mis estudios, soy estudiante de Derecho en la universidad de

Valencia. Compagino mis estudios de derecho con la moda.

¿Y no te aterroriza un poco el saber que cada fotografía, cada actualización, es vista por tantísima gente?

La verdad es que al principio sí que me lo planteaba más, sobretodo por algunos correos que recibía del estilo "¡Te he visto hoy en el bus de camino a la uni!" o "Te vi cenando con unas chicas el sábado pasado", pero cada vez me lo planteo menos.

Puede que no seamos conscientes de la transcendencia que tiene estar tan expuesto en las redes sociales, pero igualmente esas anécdotas me parecen muy divertidas

¿Tú cómo empezaste en todo esto?

Lo confieso: antes de empezar en todo esto no había leído un blog de moda en mi vida. La moda para mi era una cosa que sí, me gustaba, trabajaba de modelo en una agencia, pero no tenia ninguna aspiración concreta en este mundo (de hecho estudio la carrera de derecho).

Fue a partir de Instagram cuando decido poner mi perfil público y subir fotos, tanto de looks como de mis viajes, amigos y las cosas que me gustan hacer. Y sucede, poco a poco gente que no conozco de nada se interesa por la ropa que llevo, el sitio donde estoy comiendo, los viajes que hago, me piden consejos de estilismo, belleza, etc. Empecé a hacer colaboraciones pequeñitas con marcas y sorprendentemente la bola se hizo más grande.

¿Qué te dijeron tus padres, cómo les contaste que eras una estrella de Internet?

Aunque no se lo creían, me apoyaron desde el principio. Lo cierto es que esto no viene de golpe, ellos han estado presentes durante toda la progresión, así que ahora lo tienen más asumido, pero al principio era una locura.

¿Te reconocen mucho por la calle? ¿Puedes salir a tomar algo con tranquilidad un sábado por la noche?

Algunas veces sí. Al principio me daba mucha vergüenza, pero supongo que te vas acostumbrando. Y claro que puedes salir. La mayoría de las veces son situaciones muy divertidas, y te dicen cosas muy buenas: para mí es genial conocer a gente que le gusta lo que haces.

Tus publicaciones giran en torno a la moda. ¿Qué tipo de público sigue un perfil como el tuyo?

Creo que se trata de gente a la que le gusta principalmente la moda y la cosmética, pero también comparto los lugares que visito o mis restaurantes y rinconcitos preferidos.

¿Cómo lograste a los primeros seguidores? ¿Cuándo te diste cuenta que podías convertir tu perfil de Instagram en una cosa tan popular?

No tengo ni idea. Recuerdo que me preguntaban mucho sobre las prendas que llevaba en las fotos que subía, o sobre qué productos usaba para el pelo o maquillaje, pero no sabría decirte por qué en concreto. Me di cuenta de que empezaba a ser de verdad, serio, cuando hice los primeros trabajos y colaboraciones con marcas.

¿Y qué relación mantienes con ellos, con tus fans?

Sobretodo muchísimo respeto y agradecimiento, además tengo muy en cuenta tanto sus consejos como por supuesto sus críticas constructivas. De manera que intento responder todos los correos que recibo pidiéndome ayuda.

¿Y alguna vez se han puesto demasiado pesados?

No he tenido malas experiencias en ese sentido (toquemos madera), pero sí es cierto que en algunas ocasiones estás con más gente, y es más el apuro de saber que vas con amigos o familiares que el hecho de que alguien se acerque porque te reconoce.

¿Y el tema de las notificaciones? Tu móvil debe estar a punto de explotar cada día.

¡Tengo las notificaciones desactivadas! Probablemente mi móvil es el que menos ruido hace de este país. No me gusta nada estar pegada al teléfono y menos cuando estoy con más gente. Este es un tema de conflicto con mi madre, porque siempre se queja de que no se puede hacer conmigo (risas).

¿Cuántas horas a la semana dedicas solo a preparar todo lo que vas a subir a Instagram? ¿Cómo es el proceso?

Creo que no se puede contabilizar, son momentos, te viene una idea y la apuntas, la estructuras, haces y deshaces. Y una vez lo tienes claro haces las fotos, pero la mayoría de las veces publico cosas que llevo en mi día a día, así que intento llevar la cámara siempre conmigo

¿Llevas tú misma la cuenta?

Sí, completamente.

¿Crees que la gente se cansará de Instagram? ¿Crees que perfiles como el tuyo tienen la suficiente potencia como para mover a la gente incluso de red social?

Esto es como todo, un día puede aparecer otra red social que nos encante y las demás se queden en el camino. Aun así creo que ya no hay vuelta atrás: el hecho de que la libertad que nos ofrecen estas redes ya no se puede parar, así que si no es en Instagram estoy convencida que será con otra.

Ah, y una cosa más para terminar: ¿hay que ser guapo y atractivo para esto de internet?

Rotundamente no (risas). El talento no entiende de belleza ni estereotipos, va mucho más allá.